Alguna intuición de lo que esto puede significar tengo, pero creo que es preferible asentar los conceptos. Lo comparto.
En primer lugar, el tema de la filosofía, el más difícil, sobre todo para quienes no hemos estudiado formalmente el tema. Encontré una entrevista a un pensador católico, Stefano Fontana, que me pareció buena como contexto inicial:
La teología necesita a la filosofía, que le proporciona las categorías conceptuales para poder seguir adelante. No es verdad, como se dice hoy en día, que la doctrina católica puede ir de acuerdo con cualquier filosofía. La fe necesita la razón, pero no cualquier tipo de razón. Si la teología presta atención a filosofías que son incompatibles con la doctrina de la fe católica, poco a poco también la visión de esta se deforma y, sin darse cuenta, empezará a creer en una fe distinta…. Ciertamente, no hay un solo filósofo que pueda representar a la filosofía compatible con la fe cristiana, porque esta no se sitúa al mismo nivel que ninguna otra filosofía en concreto; pero esto no significa que haya que aceptar el pluralismo ya que, de hecho, este hace que la fe sea indiferente a la razón. Si la fe puede estar de acuerdo con todo tipo de razón, significa que es indiferente a las razones de la razón. De esta manera, se destruye el nexo íntimo existente entre razón y fe, y pensando que somos católicos, en realidad somos protestantes[1].Es decir, la filosofía es importante para la teología, pero si no se quiere desviar el contenido de la revelación tal como lo transmiten las escrituras, la enseñanza apostólica y el Magisterio de la Iglesia, debe elegirse bien el tipo de filosofía que se estudia y en la que se sustenta el intento de explicación mediante la razón de los misterios divinos.
Hay muchas escuelas filosóficas. La filosofía realista es una. Ésta critica la filosofía idealista que deja de referirse “al real ser de las cosas y se convierte en ciencia del ser necesario y posible”[2]. Es decir, a idealismos y concepciones puramente intelectuales que no se sustentan en la realidad. La filosofía realista también se opone a las filosofías escepticistas, aquellas que parten de la duda de que se pueda llegar a conocer la realidad. El relativismo moral es una, pero no la única.
Dentro de la filosofía realista hay dos corrientes que es necesario diferenciar. Berthold Wald, un filósofo católico, las denomina: la interna, aquella que niega que pueda diferenciarse lo que es la realidad y su modo de existencia, en contraste con la metafísica, la que supone una diferenciación entre la realidad y su representación conceptual. Esta última es la filosofía realista en la que se basa la Teología del Cuerpo. Como filosofía, estudia la naturaleza, estructura, componentes y principios fundamentales de la realidad. Parte de Aristóteles y Tomás de Aquino.
Resulta que el personalismo también es una corriente filosófica. Surgió en la Europa de entre la I y II guerras mundiales con el objetivo de ofrecer una alternativa al colectivismo fascista y comunista que buscaba el bienestar social imponiéndose sobre la libertad de la persona, y el individualismo capitalista que olvidaba su aspecto interpersonal[3]. El personalismo considera la persona como un yo y quién, con afectividad y subjetividad, un ser relacional esencialmente social y comunitario, concibiendo a la persona en tres niveles: corpóreo, psíquico y espiritual, con sexo: varón y mujer, y quien le da primacía al amor, la libertad como posibilidad de autodeterminación, un carácter narrativo a su existencia y a la trascendencia como relación con un Tú[4].
Los estudiosos fundan el origen de esta alternativa, en su versión cristiana, en los escritos filosóficos de Dietrich von Hildebrand, filósofo y teólogo católico alemán, y luego en Karol Wojtyła, muy influido por los escritos del primero sobre el matrimonio y la sexualidad[5].
Ahora la antropología. Es la ciencia que estudia al ser humano de una forma integral, tanto sus características físicas como animales como su cultura, que es el rasgo único no biológico[6].
Uniendo ambos conceptos se llega a la antropología personalista, la cual se explicita en el numeral 357 del catecismo de la Iglesia Católica: “Por haber sido hecho a imagen de Dios, el ser humano tiene la dignidad de persona; no es solamente algo, sino alguien. Es capaz de conocerse, de poseerse y de darse libremente y entrar en comunión con otras personas; y es llamado, por la gracia, a una alianza con su Creador, a ofrecerle una respuesta de fe y de amor que ningún otro ser puede dar en su lugar.”
----------------------------------
[1] https://www.vanthuanobservatory.org/esp/el-realismo-liberador-de-la-filosofia-cristiana-entrevista-a-stefano-fontana/
[2] http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0120-00622016000200017
[3] https://proyectoscio.ucv.es/articulos-filosoficos/antropologia-personalista-cuestiones-clave-por-raquel-vera/
[4] Ibid.
[5] Wikipedia Dietrich von Hildebrand
[6] Wikipedia Antropología
No hay comentarios.:
Publicar un comentario